Nishinomiya, un recién llegado, no me escuchó parlotear ni decir cosas, y su calificación dentro de la empresa cayó. Un día, para prepararme para una emergencia, esperé el nido en un hotel cercano a la empresa. Nishinomiya también se quedó en el hotel que yo tenía. Fui testigo de cómo Nishinomiya se masturbaba en ropa interior lasciva. Me volví loco muchas veces mientras me retorcía por la estimulación de la máquina de masaje eléctrica. Inmediatamente después de recibir el acme, Nishinomiya sufrió convulsiones y no podía ponerse de pie. Lo aproveché como si fuera una oportunidad, me volví loco y sacudí mis caderas.